Que unas empresas u organizaciones tengan mayor éxito que otras, partiendo de la misma base competitva, los mismo recursos y el mismo escenario, recae en la capacidad para gestionar la innovación desde dentro y poder hacerla llegar a los consumidores.
Y no es tarea fácil esa, dentro de las empresas existen diferentes tipos de perfiles de personas y no todas ellas tienen la misma actitud y la capacidad ante el proceso de la innovación. Así es que desde los departamento con mayor responsabilidad estratégica se deben identificar este tipo de roles y desarrollar estrategias específicas para cada grupo.
El investigador y sociólogo, el Dr. Everett Roger, generó una teoría a partir de sus investigaciones que define de una manera muy práctica y evidente el perfil de 5 tipos de personas y su reacción ante la innovación. A esta conclusión se le ha denominado La Curva de la Innovación y se representa tal que así:
Como podéis distinguir en la imagen, se divide en 5 grupos:
- Los innovadores
- Primeros adoptantes
- Mayoría temprana
- Mayoría tardía
- Rezagados
Los innovadores: Estos son los apasionados de la innovación y los que viven a diario para generar nuevas ideas creativas. Su pasión a veces es positiva y a veces un tanto negativa, pero la organización debe cuidar a este tipo de perfiles.
Los primeros adoptantes: Son las personas que tienen predisposición abierta a probar las innovaciones y hacen un balance crítico de las mismas. Lo hacen de manera cuidadosa y si realmente creen en ellas las adoptan. Suelen ser perfiles con un carácter propio de líderes de opinión. La organización también debe cuidar a este grupo y serán ellos los que comuniquen de mejor manera la innovación al resto de grupos, mejor que los propios innovadores.
La mayoría temprana: Son personas que de manera racional aceptarán los nuevos cambios y adoptan la innovación de una manera cuidadosa, guiándose en todo momento por los líderes de opinión. Para llegar a ellos se necesita estrategia de comunicación definida. En este momento, lo nuevo deja de ser una novedad.
La mayoría tardía: Son personas por lo general totalmente escépticas al cambio, pero que con el paso del tiempo van asumiendo las innovaciones por el mero hecho de no quedarse fuera del juego. Muchas veces, la pereza de este grupo al cambio, radica en los hábitos tradicionales, enraizados, la desconfianza, etc.
Los rezagados: Son el grupo más radical y con el pensamiento más crítico ante cualquier cambio organizacional. Sólo asumirán la innovación si se ha implantado por completo.
El trabajo de las personas encargadas dentro de la organización de desarrollar las innovaciones recae en identificar los diferentes perfiles y asociarlos con cada uno de estos grupos, de esta manera se podrán generar estrategias bien definidas.
Si nos llevamos esta teoría al mercado, a los consumidores, se podrán hacer paralelismos casi idénticos. Lo que denominamos de manera resumida: NOVEDAD, TENDENCIA Y MODA.