Estamos asistiendo a un momento donde la creatividad está muy presente en el desarrollo de productos. Esto puede ser debido a la fuerte competitividad que reina en el entorno y en la búsqueda por la diferenciación, pero también puede responder al cambio que vivimos en el entorno desde la pandemia sanitaria hasta nuestros días. Desde Asia hasta occidente ha llegado un concepto relacionado con la purificación de aire que ahora es clave para la innovación de muchas marcas.
Aunque todavía no hemos dejado atrás el virus de Covid19, mucho de los experimentado ha llegado para quedarse con nosotros. De hecho, algunas de las experiencias vividas en occidente ya se daban en Asia desde hace años y esto está haciendo que la innovación se exporte ahora hasta otros países. Es cierto que la cultura y los hábitos tienen que adaptarse y aprenderse, pero parece que hay todo un foco por descubrir en cuanto a la salud y la prevención, o así lo entiende la marca Dyson.
Los nuevos auriculares Dyson Zone presentan toda una innovación en el mercado de los auriculares. La marca, reconocida por el poder de sus aspiradores ciclónicos, ahora se adentra en el mundo del sonido aplicando una original y atrevida combinación junto a la purificación de aire. Es cierto que está generando muchas opiniones, pero… ¿y qué no en nuestros días? Recuerda lo sucedido con los huevos fritos envasados de Mercadona.
La combinación entre audio y purificación de aire de los auriculares Dyson Zone
Hay una potente herramienta de creatividad relacionada con el marketing lateral y que es clave para nuestro libro de “Los 7 pecados laterales”: la combinación. Es una técnica de mucho potencial que puede dar resultados muy atractivos, pero también algo atrevidos. Algo parecido parece que ha sucedido con la última propuesta de Dyson. Estos auriculares no dejan a nadie indiferente gracias a sus prestaciones, pero sin duda por su aspecto. Una mezcla de diseño andrógeno y punk que nos remite a las futurísticas películas de los años ochenta.
Los Dyson Zone están compuestos por unos auriculares de alta tecnología con cancelación de ruidos y una diadema frontal capaz de purificar el aire que respiras. Un aspecto único para unos auriculares que poseen características inigualables en la actualidad. La fusión entre disfrutar de la música al más elevado nivel y la sensación de permanecer seguro es la clave para este producto tan sorprendente.
Con una autonomía de hasta 50 horas escuchando música y una reducción en 38dB, se convierten en todo un producto premium en su mercado. Cuando se usa la diadema de purificación de aire la autonomía se reduce a 4 horas, pero cuenta con filtros electrostáticos capaces de limpiar el 99% de la contaminación del aire. Una balanza entre el placer y la seguridad muy interesante.
Los aspectos culturales y la exportación de conceptos
Como indicaba hace unas líneas, la preocupación por la calidad del aire que se respira es algo común en mercados asiáticos, donde la contaminación de las ciudades tiene niveles verdaderamente elevados. Las viviendas están equipadas con purificadores de aire y las personas usan mascarillas en la calle, con lo que propuestas como los Dyson Zone pueden tener mucho sentido si se recogen esos insights.
Ahora bien, ¿este tipo de productos tendrá recorrido en occidente? Los aspectos culturales y la manera de vivir influyen mucho en la aceptación de un producto. Es cierto que la pandemia nos ha dejado muchas huellas que responden a la preocupación por la salud y la higiene, pero no sabemos si eso se olvidará pronto o no. O quizás, una nueva alerta sanitaria termine por reafirmar estos conceptos.
Lo que sí es claro es que este tipo de propuestas combinan dos aspectos que nada tienen que ver entre sí, pero que juntos pueden encontrar sentido. Disfrutar de buena calidad de música y además respirar aire de calidad es algo que puede marcar la diferencia en la calle y posicionando en status diferentes a los consumidores.
