Muchos son los problemas a los que las familias y los ciudadanos en general se enfrentan con la escalada de precios actual. Aún así, según las cifras, por ahora no serán las mascotas las que sufran las consecuencias. Las mascotas son un mercado de gasto constante pese a que la inflación está cambiando los hábitos de los consumidores.
Cada vez es más común encontrar familias con mascota en casa. Es un mercado que siempre ha estado ahí, pero que desde antes de la pandemia venía experimentando un serio crecimiento. En la actualidad el número de mascotas en España se encuentra entre los 29 millones, pero desde 2019 sobre todo los gatos y perros han crecido en más de dos millones cada uno.
Tanto es así, que la tendencia “pet-friendly” está adentrándose en la vida de las personas hasta el punto de hacerles un hueco en la familia. La humanización de las mascotas cada vez está más presente y eso se nota en el esfuerzo que hacen las marcas por ofrecer más y mejores productos y servicios.
De hecho, se prevé que el gasto entre comida y accesorios para mascotas llegará a los 36.500 millones de euros en Europa este año. Estas cifras muestran, nada más y nada menos un crecimiento del 13% en los últimos tres años. Los gastos en comida, complementos y salud copan las compras del consumidor con mascota.
Productos premium: la gourmetización del mercado de las mascotas
Si atendemos al cálculo que hace Fediaf, el líder de la industria de alimentación animal en Europa, hay entorno a 90 millones de hogares con uno o más mascotas. Esto lleva a que dentro de hogares, o fuera de ellos, hay unos 113 millones de gatos, 92 millones de perros, 48 millones de pájaros y unos 56 millones entre conejos, peces y tortugas. Todo un mercado donde experimentar con nuevos productos y servicios.
De hecho, este incremento de cifras en el número de mascotas responde a ciertas variables del entorno. Entre ellas, los bajos salarios de los más jóvenes que deciden tener mascota ante la difícil decisión de tener un hijo, o el efecto confinamiento y la necesidad de tener compañía. Además, otros parámetros como el envejecimiento de la población también ayudan a que el sector crezca, por ejemplo, muchas personas mayores, viudos o viudas deciden optar por tener mascota para paliar la soledad y la tristeza.
Todo esto hace que la mascota juegue cada vez más un papel mucho más humano. La concienciación al cuidado de los animales domésticos ha elevado la sensación de ser un miembro más en la familia, y por tanto, entrar a formar parte de derecho en los gastos domésticos.
Los productos y servicios que reciben las mascotas están enfocados a su cuidado y entretenimiento. Muchos de ellos siendo totalmente caprichos y donde el consumidor no escatima en gastar lo necesario para que su mascota esté plenamente feliz. De ahí, el gran surtido de opciones, por ejemplo en comidas, desde las tradicionales hasta las etiquetadas como gourmet o sibaritas. Ejemplos como Snuffle Dog Beer, la cerveza para perros, las listas de reproducción de música para mascotas de Spotify, o incluso las campañas enfocadas a “pet lovers” como la que desarrolló Burger King con su Dogpper dejan clara la tendencia.
La innovación y la sostenibilidad en el mercado “petcare”
Y es que, esta “humanización” de las mascotas lleva a traspasar las barreras funcionales para convertirse en activos emocionales que las marcas pueden explorar. De hecho, podemos observar como toda una corriente de creatividad está trayendo al mercado numerosos productos y servicios innovadores en el mercado “petcare”. Sin entrar en profundizar el espacio que los animales de compañía están ocupando en las redes sociales con los denominados “pet influencers”.
Unleashed, el programa de innovación de Purina, convoca la recepción de nuevas ideas sobre nutrición sostenible provenientes de emprendedores. En la actualidad, dos empresas españolas como Moa Foodtech están desarrollando productos que combinan la biotecnología y la inteligencia artificial para transformar subproductos de la industria agroalimentaria.
Es un hecho que la sostenibilidad y la eficiencia en procesos debe llegar a la industria de la mascotas, puesto que su impacto medio ambiental es cada vez más grande. Lo que hacen desde Moa es coger residuos y subproductos de la industria agraria y los revalorizan a través de la fermentación.
Dentro de la innovación del sector, encontramos también propuestas que traspasan el mundo de los humanos, como la alimentación para mascotas que desarrollan desde Rovinfood. Comida real con ingredientes naturales, cocinada al vapor siendo completa y equilibrada. Un total y super ingenioso “realfooding” para mascotas.
En conclusión, un mercado marcado por la cercanía de la mascota con la persona que marca una relación de consumo muy particular. Veremos cómo se comporta la tendencia en los próximos tiempos, pero lo que está claro es que cuando una mascota entra en casa empieza una vida de consumo adicional que hay que tener muy en cuenta.
