¿Normal o con carne? Burger King, el cambio de conducta vegana

Cuando vemos que una multinacional de comida rápida, como es Burger King, plantea un mensaje como, “¿normal o con carne?”, algo importante se está moviendo ahí fuera. En esta nueva entrada te cuento más sobre la última campaña que la marca ha lanzado en Austria sobre el veganismo y la conducta vegana.

Que los hábitos de consumo y alimenticios se están diversificando no es nada nuevo. No nos sorprende que existan diversidad de maneras de entender la alimentación, pero sí sorprenden los movimientos de las marcas. Aún, cuando están, o han estado ancladas a un mismo concepto desde su origen.

Estos nuevos hábitos responden a inquietudes y deseos que se están dando en muchos perfiles de consumidores. Uno de ellos es la eliminación de la carne en la dieta de muchas personas, hecho que se fundamenta en razones que van desde la salud hasta el cuidado del medio ambiente. Diversos estudios advierten que el abuso de carne procesada es perjudicial para la salud, mientras que otros nos indican que la producción de carne es origen de gran cantidad de contaminación ambiental y de explotación de recursos. Dos motivos cargados de peso para que cada día más personas tomen decisiones que impactan en su día a día.

La conducta vegana es lo nuevo normal

Y esto pasa porque nuevos conceptos lleguen a nuestra actualidad. El número de consumidores con mayor porcentaje de consumo vegetariano o vegano crece, pero también lo hace paralelamente la tendencia positiva que transmite ese estilo de vida. Los valores positivos que transmite el movimiento están siendo recogidos por muchas marcas para cambiar de verdad sus estrategias, o también, desgraciadamente, para llevar acabo acciones de greenwashing.

whopper vegano

En este sentido, Burger King acaba de lanzar la campaña “the new normal”, podemos llamarle también experimento, en sus restaurantes de Austria donde la opción primera es la vegana. Es decir, la pregunta a la hora de seleccionar el menú será: “¿normal o con carne?”, cambiando el clásico “¿normal o sin carne?”. Una inversión del modelo que otorga relevancia al nuevo modelo que defiende el veganismo y pone patas arriba la estrategia tradicional de este segmento de marcas de comida rápida basada, principalmente, en la carne.

De hecho, según datos de la propia marca, uno de cada cinco Whopper que se venden en Alemania son de origen vegetal, y en Bélgica incluso uno de cada tres. Cifras que nos hacen pensar en un cambio de comportamiento del consumidor hacia una conducta vegana que, lógicamente, hace que ciertas marcas se preparen para el futuro.

¿La conducta vegana será la tendencia del futuro?

Aunque no pienso que será un cambio rápido, incluso quizás nunca llegue, pero sí pienso que debemos entender estos movimientos como pequeñas pruebas de mercado. Estar listos para el “por si acaso”, pero sobre todo para tantear el mercado y el entorno. De hecho, hasta el momento, la campaña está siendo bien recibida en la red social, excepto por el movimiento ecologista que señala la destrucción de bosques hacia movimientos de este tipo de marcas.

En definitiva, sabemos que hoy el consumidor recibe de buen agrado la capacidad de elegir, y también de elegir cuál es su “normal”. En este caso si es la carne o lo es la opción vegana. Queda preguntarnos si estas opciones veganas, sustituyendo a la carne, son una normalidad o están sucediendo en estos consumos de comida rápida como paliativo al exceso de calorías. El posterior sentimiento de culpa que recae en un consumidor cada vez más preocupado por la salud, pero con ganas de disfrutar de pequeños homenajes… sería interesante plantearlo.

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Salted Books anima a comprar a librerías en lugar de a billonarios

En un mundo donde las grandes corporaciones parecen dominar todos los aspectos de nuestras vidas, desde lo que comemos hasta cómo consumimos información… llega Salted Books, desde Lisboa, para recordarnos la importancia y el impacto de apoyar a los pequeños negocios locales. En particular a las librerías independientes. Su mensaje es claro: compra en librerías, no a un billonario (buy book from bookshop not a billionaire)

El valor de lo local ante la globalización

Salted Books no es solo una librería, es un espacio cultural y comunitario. Al entrar, te puedes sentir acogido por un ambiente que respira autenticidad, un lugar donde cada libro ha sido seleccionado cuidadosamente, no solo para venderse, sino para aportar algo significativo al lector. De hecho, solo tienen en stock unas pocas unidades de cada ejemplar. Este enfoque, obviamente, contrasta con la experiencia impersonal, pero porqué no decirlo, atractiva, de las tiendas online donde los algoritmos dictan las recomendaciones y el objetivo principal es maximizar las ventas a gran escala.

En Salted Books, cada libro cuenta una historia. No solo la que está impresa en sus páginas, sino también la historia de su selección, de cómo llegó a estar en ese estante y de lo que representa para la comunidad que lo rodea. Comprar allí es una experiencia enriquecedora, un acto que conecta al lector con una red más amplia de autores, editores y otros lectores que comparten una pasión genuina por la literatura.

salted books lisboa

Un mensaje basado en ironía

El mensaje de Salted Books resuena con fuerza en un contexto global en el que la homogeneización de la cultura amenaza con borrar las diferencias que nos enriquecen. Las grandes tiendas como Amazon tienden a promover los títulos más vendidos, aquellos que tienen el mayor atractivo comercial, dejando a un lado obras más arriesgadas, innovadoras o simplemente diferentes. Esto no solo limita la diversidad literaria, sino que también reduce el acceso a alternativas y a narrativas que desafían el statu quo.

Al elegir comprar en una librería independiente, los lectores están tomando una postura contra esta tendencia. Están diciendo que valoran la diversidad, que aprecian las recomendaciones personalizadas y que prefieren apoyar a las personas detrás de cada libro, desde el autor hasta el librero, en lugar de contribuir a la creciente concentración de la riqueza.

Más allá de un libro o un negocio local

Este mensaje principal de Salted Books es más que un simple mensaje con un gancho de marketing excelente. Nos invita a repensar nuestras decisiones de compra y a considerar el impacto de nuestras elecciones en el mundo que nos rodea.

Comprar en librerías independientes es mucho más que adquirir un producto; es un acto de apoyo a la cultura, a la diversidad y a la comunidad. Es una manera de resistir la dominación de los gigantes corporativos y de asegurarnos de que el futuro de la literatura y la cultura siga siendo tan vibrante y diverso como lo es hoy.

De hecho y, recogiendo una cita de la entrevista que concedieron a Portugal Residents: “What we really want are wonderful published authors to come and launch their books here. I’d like to have a place where we’re having panel discussions about books and certain topics. But we’ve got to build the community first”. Cuando las cosas se hacen con amor, la comunidad surge.

Así que la próxima vez que busques un buen libro, piensa en lo que estás apoyando con tu compra. En lugar de optar por la conveniencia de un clic, considera la posibilidad de visitar una librería, si es Salted Books en Lisboa, genial, pero seguro que tienes alguna cerca en tu barrio o en tu ciudad. Porque al hacerlo, no solo te llevas un libro a casa, también ayudas a mantener viva la cultura y la diversidad en un mundo que necesita desesperadamente ambas cosas.

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Juegos Olímpicos de París 2024: el evento de las redes sociales, polémicas y controversias

Sin duda, los Juegos Olímpicos son el mayor evento deportivo a nivel internacional, congregando múltiples disciplinas y atletas de más de 200 países. También se han posicionado como un punto de referencia sobre comunicación, publicidad, promoción y, la verdad, es que son una marca en sí. 

En esta edición, hemos visto despliegue de campañas épicas, tanto de marcas patrocinadoras como de países apoyando a sus equipos o anunciándose hosts; diseño de branding personalizado para cada edición, unificando el logo propio de los juegos con la esencia del país anfitrión; cuentas de diferentes redes sociales dedicadas a los juegos correspondientes, como lo fue la cuenta de Twitter (ahora “X”) de Tokio 2020 (año en el que crearon también la cuenta en español, y que causó un furor tremendo entre los usuarios latinoamericanos). Finalmente, la llegada de los juegos a TikTok, tanto de su cuenta oficial como la cuenta de Paris 2024 -creada hace 4 años cuando anunciaron que serían el nuevo host- y la estrella revelación, la cuenta de los juegos paralímpicos. 

Para poder entender la evolución de esta gran marca desde la perspectiva del marketing y el conocimiento e interacción de los usuarios, desde SAMY Alliance han realizado un ejercicio de análisis, investigación y escucha social, gracias a las herramientas de Capture Intelligence, agencia de data & research. 

En números: ¿qué hablaron las redes sociales de los JJOO?

En el marco de la inauguración de los JJOO, se registraron más de 90 mil conversaciones en español en redes sociales con respecto a los juegos a nivel global; y si hacemos foco en algunos países de Latinoamérica vemos gran relevancia local; países como Argentina tuvieron +20 mil menciones, Colombia tuvo +15 mil menciones, y México casi llegó a las 27 mil menciones por parte de los usuarios. 

Aún así, la relación de las conversaciones con el sentimiento es lo que realmente demuestra lo que es importante para el espectador; con respecto a esas más de 60 mil conversaciones de estos 3 países, +25 mil fueron categorizadas como negativas, otras 21 mil como positivas; y +15 mil registraron como neutrales. 

Los cuatro grandes eventos que protagonizaron ese sentimiento negativo fueron claros: la representación católica de La Última Cena, la salubridad del Río Sena (donde se realizaron algunas de las competencias acuáticas), reacciones frente a la presencia del equipo Israelí, en el contexto de la actual situación con Palestina, y la presencia de Steven van de Velde, el jugador de voley-playa holandés que cumplió una condena en prisión por violación. Con estos eventos unificados, más del 41% de lo que se conversó en esos días sobre los Juegos Olímpicos fue negativo, opacando esas otras 20 mil conversaciones que vitoreaban a los atletas y celebraban la presencia de sus países en la competencia. 

Ya en la siguiente semana en la que se desarrollaron los primeros juegos y competencias, el número de conversaciones en Latinoamérica aumenta a 108K; manteniendo un sentimiento negativo predominante, siendo la protagonista la polémica de la boxeadora Imane Khelif, que fue señalada como transgénero, y que rápidamente recibió el apoyo del COI. 

Conociendo a la audiencia de los JJ.OO

Con respecto a los usuarios que comentaron sobre la competición, un 60% tiene entre 18 y 35 años y un 6.75% tendría entre 35 y 60 años, por lo que hay una buena proporción de usuarios Gen Z y Milennials, pero todavía hay una representación significativa de Gen X. 

De acuerdo al estudio ConZumer Journey de Samy Alliance, que analiza las principales características de los usuarios Z, Zillennials y Milennials, estos usuarios buscan relaciones con las marcas cada vez más humanas, y esperan empatía, respeto y transparencia por parte de las marcas. Un dato relevante es que el un 70% de ellos exige que las compañías muestren apoyo a las comunidades LGTBQI+. Por esto, se infiere el por qué la escena, aparentemente paródica, de la Última Cena de Leonardo Da Vinci, ejecutada por el artista Thomas Jolly y recreada por drag queens, una modelo transexual y un cantante disfrazado del dios griego del vino, provocó la indignación de segmentos de la sociedad de todo el mundo. Tanto para generaciones mayores como para los más jóvenes que buscan respetar y cuidar las creencias de cada quien, una escena paródica es un hilo muy fino sobre el cuál caminar. 

Por otro lado, una característica radical de estas generaciones jóvenes, y que representan el grueso de usuarios de redes que hablaron sobre los Juegos Olímpicos, es su relación con la sostenibilidad; que cada vez exige más no sólo productos, sino también comunicaciones respetuosas con el medio ambiente. De hecho, según el estudio de Marketing Trends 2024, uno de los grandes pilares de este año está relacionado con el impacto medioambiental, ya que el 63% de los consumidores afirma haber comprado artículos de segunda mano en el último año y, en 2023, el interés por los temas de sostenibilidad creció un 32% respecto al año anterior, con especial atención al medio ambiente, la energía y el ahorro.

Con esta carga tan orientada hacia el cuidado y el respeto hacia el medio ambiente, otro tema de conversación relevante giró en torno a la elección del Río Sena como uno de los escenarios para competencias acuáticas, ya que a  pesar de que Francia ha invertido alrededor de 1.400 millones de euros para mejorar la calidad del agua, bañarse en el río ha estado prohibido desde 1923 y ha habido denuncias de deportistas por el estado del agua y el riesgo para la salud que representa competir allí.

Finalmente están las cuestiones políticas y morales, un tema sumamente controversial y delicado. Según el estudio, los usuarios cada vez más rechazan las respuestas “tibias” de las marcas ante eventos de interés internacional, lo que se manifiesta por ejemplo en cómo un sector de la audiencia no dudó  en alzar su voz cuando consideraron que la presencia del equipo Israelí representaba “dejar de lado” la situación armada en Palestina, o cuando consideraron permisivo la presencia de Steven van de Velde, quien cumplió una sentencia por abuso sexual a una menor de edad. Esto para las marcas es un llamado a la atención; los usuarios necesitan sentirse apoyados más allá del producto o servicio; buscan marcas que compartan valores y sistemas morales. De hecho, según Hubspot, el 64% de los consumidores comprará o hará boicot a una marca únicamente por su posicionamiento ante una determinada cuestión social.

Más allá del deporte

El análisis de la conversación de las redes sociales permite ver cómo los Juegos Olímpicos son un evento de relevancia mundial que va mucho más allá de la competencia deportiva, e interpelan a la audiencia en diferentes áreas, desde la política y la ética, a la cultura y el sentimiento de comunidad.

Por esta razón, desde Samy Alliance analizan cómo los Juegos han desarrollado su estrategia de marketing, buscando maximizar esta conexión con las audiencias en diferentes áreas. Anna De Lachapelle, Brand Strategy Account Director para EMEA, identifica 3 tendencias claras:

En líneas generales, los Juegos de París 2024 nos han dejado múltiples ejemplos de cómo un evento deportivo crea un ecosistema que va más allá de la competencia siendo tema de conversación global e interpelando a las audiencias en diferentes aspectos: desde discusiones políticas y éticas, a intercambios culturales diversos, y conexiones emocionales potentes.

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