Lo llevo pensando desde hace tiempo, el concepto de la sostenibilidad ya no es una ventaja competitiva como tal si no que se ha convertido en un genérico. No quiero decir que no se deba atender a ella, al contrario, pienso que es una obligación como marcas, pero la cuál ya no aporta la diferenciación que daba hace años. Ahora se debe enfocar la sostenibilidad de distinta manera, por ejemplo, como lo hacen desde Nucao y su chocolate sostenible que no se muestra sostenible.
Es algo paradójico y un poco trabalenguas, pero el fondo de esta cuestión que hoy te planteo tiene mucho que ver con el desarrollo de productos en la actualidad. Crear enfoques amigables con el entorno que nos rodea es responsabilidad de las marcas y hacerlo con transparencia es lo más importante. Estamos viendo muchos casos de greenwashing que deben detenerse para que los verdaderos proyectos tengan recorrido de verdad. Para ello y, aunque parezca extraño, quizás se debe huir de la etiqueta sostenible.
La estrategia de Nucao: Producción sostenible, packaging respetuoso y reforestación
Hay una frase de los creadores de esta marca de chocolate alemana que define perfectamente la identidad de la organización y sus productos: “en Nucao, creemos que hacer lo correcto debe ser divertido”. Es muy explícita porque no se trata de buscar el impacto por hacer productos amigables, si no hacerlos y contar historias singulares sin tener que recurrir al martilleante concepto de sostenibilidad.
Los producto de Nucao proponen un chocolate con impacto positivo en entorno, vegano, sin edulcorantes ni sabores añadidos. No añaden nada de azúcar, nada de plásticos. Combinan los ingredientes naturales y orgánicos para encontrar los productos más sabrosos para que sean más saludables para las personas y para el medio ambiente. Sus packagings son totalmente compostables y sostenibles.
Además, su compromiso con el planeta va más allá. Están inmersos en proyectos de reforestación con el objetivo de plantar mil millones de árboles en 2030 invirtiendo el 3% de las ventas de sus productos.
La sostenibilidad y el consumo consciente pueden tener estilo y diversión
Hablamos mucho del consumo consciente, pero en verdad debemos atender a ello para poder entenderlo y aplicarlo a los desarrollos de productos de manera real. Un impacto positivo no se consigue simplemente a través del altavoz de la sostenibilidad, si no creando ecosistemas alrededor de las marcas que sean atractivos para el consumidor y que, sí, además, sean sostenibles.
Atrás pueden quedar todas las opciones ecológicas, sostenibles, amigables, etc. que aplican diseños idénticos basados en los parámetros convencionales del “eco-friendly” para proponer cosas distintas. No por comunicar más que tu producto es sostenible en su envase lo es más y el consumidor lo va a aceptar de mayor agrado.
Como plantea Nucao, la responsabilidad social también puede ser divertida y así son sus productos. Con una marca totalmente renovada, atractiva y llamativa y unos envases que abusan en el buen sentido del color. ¿Y dónde está el concepto de sostenibilidad entonces? Visualmente, en un divertido icono que resumen perfectamente el enfoque: “el buen chocolate. Orgánico, vegano y limpio”.