El consumidor quiere productos sorprendentes, originales, únicos. Que destapen una exclamación y consigan la atención del público, además de aportar una novedad al mercado. Nada fácil esta ecuación, pero a menudo nos encontramos con propuestas que la cumplen y desde marketing somos responsables de que esto ocurra.
Hoy hablamos del color negro dentro de un ámbito poco habitual pero que seguro que no deja a ningún consumidor indiferente. Ya hablamos de la tendencia del color negro en marketing y también de la Eclipse Milk, la leche negra, pero en esta ocasión el protagonista es un producto de alimentación muy singular: BLK, el agua negra.
Difícil de imaginar en un ámbito positivo, puesto que la asociación entre el color negro y el agua es totalmente rechazable. Siempre hemos vinculado al agua atributos como incolora, inodora, insípida, transparente, fresca… atributos que chocan de frente con un concepto de agua negra.
La propuesta de esta empresa canadiense BLK, es un agua que proviene de un manantial alimentado por distintos acuíferos con millones de años de antigüedad. Este agua tiene diferentes minerales que son propios de la materia orgánica prehistórica de origen vegetal, localizado en la Reserva Forestal de Sandiland.
La marca cuenta que estos minerales son minerales fúlvicos, pero en realidad están compuestos 77 minerales diferentes y ácido fúlvico. Este agua negra tiene un peso molecular bajo y eso favorece su absorción y por tanto hidrata más rápido que el resto de aguas, por lo menos eso aseguran desde la marca. Tiene pH9, no contiene colorantes ni sabores artificiales y cuenta con certificación Kosher.
En los nuevos productos que ha lanzado la marca podemos distinguir como busca un nuevo posicionamiento hacia el mundo del deporte y hacia un estilo de vida saludable y activo, chocando de nuevo el color negro con todo estos argumentos. Quizás, sea eso su primer punto de conexión con el consumidor.
La propuesta es totalmente diferente, llamativa y original. Pura creatividad que podemos identificar como una inversión completa, desde la transparencia y pureza del agua que todos conocemos, hasta el otro extremo, un agua negra, oscura y misteriosa.
Dicha inversión es propia de la metodología de Marketing Lateral que tanto aporta al desarrollo de productos sorprendentes y al marketing.
¿Te atreves con el agua BLK, el agua negra?