El concept de micro-segmentación del cual hablamos de forma constante en el blog, es la herramienta principal para adaptar tendencias incipientes a los pequeños nichos de mercado que crecen con ellas.
Así es el caso de la tendencia ecológica y slow cuando nos referimos al entorno de los niños, y más en concreto en el sector de juguete. Muchos papás y mamás buscan el juguete que represente unos valores concretos, tanto en la fabricación y/o procedencia, como en el aporte educativo y de ocio que le suponga al pequeño.
De este modo, son cada vez mas los juguetes ecológicos o socialmente comprometidos. Una tendencia en auge que está transformando parte de este sector que suma un importante granito de arena al crecimiento y desarrollo social, cultural e intelectual de los más pequeños.
Hoy, os traigo un juguete que es ejemplo de todo este planteamiento estratégico y de marketing al cual me refiero: el Circuito de Bolas Kullerbü, Premio a Mejor Juguete de 2019 por la Asociación Española de Fabricantes de Juguetes.
Circuito de Bolas Kullerbü
Se trata de un juego de construcción a base de una pista de ralley desmontable y fácil de montar con diferentes opciones. Es apto para los mas pequeños de la caso, para niños y niñas a partir de 2 años y hasta 8 años.
El juguete cuenta con atributos muy importantes como la seguridad total para la edad, ser eco-friendly, conectable con dispositivos móviles, combinable, ampliable, realizado con madera de bosques sostenibles y con pinturas y lacas a base de agua.
Además, es un juguete duradero por su utilidad y por la calidad de sus materiales. El juego se adapta al crecimiento del niño, sumando complejidad y diversión a las nuevas construcciones planteadas.
Además de las características funcionales que pueden decantar la decisión de compra, el juego propone un pensamiento imaginativo a la hora de combinar las piezas para formar nuevos espacios de juego. Esto estimula la motricidad final, el razonamiento lógico constructivo, el aprendizaje y el acercamiento a conceptos de aceleración y velocidad.
Juguetes como el Circuito de Bolas Kullerbü son un ejemplo de combinación perfecta entre función y emoción para conseguir una balanza perfecta enfocada a un estilo de vida muy interesante. Los niños.